28 febrero, 2009

Abrió la puertita - Los gusanos de R


–Vaya… tienes un teclado –le dije a R, mirando la repisa. Él se levantó de la silla y lo tomó. Volvió a incorporarse y empezó a tocar. De pie, yo miraba otros objetos que estaban sobre el estante, me detuve en el volante de un auto convertible plateado, a escala, que estaba cerca de Batman.

–Sí, a ver si conoces esta canción –dijo mientras acomodó el teclado sobre sus piernas.

–Eh… sí sé cual es, espera ya te digo… –R me miraba con expectativa y pensé que detener mis ojos en los suyos no me ayudaría a recordar la canción, así que volví a ver el convertible y me di cuenta que era un Mercedes Benz–. Ya sé, es Everything I do I do is for you.

–Sí, esa es, la clásica de Bryan Adams… ven acá y te enseño a tocarla.

–A ver, pero despacito que si no, no aprendo –le dije acercándome a él. R se sentó en la cama y yo, en la silla. Puse el teclado sobre mis piernas y empecé a descubrir el sonido de cada tecla. Levanté la mirada y sorprendí a R observándome con cómica ternura. Seguí tocando y sonreí.

– Tienes que poner las manos así –me dijo poniendo las suyas como ejemplo–. Y empiezas.

–No, mejor otra que sea más fácil –le dije retirando sus manos del teclado y tocando teclas al azar.

–Ok, ¿la niña quiere otra canción? Vamos a tocar otra canción –dijo torciendo la mirada de manera graciosa. Y empezó con Minutos de Ricardo Arjona. Sonaba muy fácil. Creo que la música o lo que sea que haga este señor es bastante sencilla.

–A ver, presta, esa sí puedo –le dije sonriendo y sacando sus manos como si quitara polvo. Él sonrió escéptico. Esta parte de la canción solo tiene tres notas. Luego de cinco intentos y de un par de frases desafiantes de R, pude tocarla.

–¿Ves que sí pude? –le dije con tono pretencioso cuando puse el teclado en la repisa.

–Siempre supe que podías –dijo R sonriendo y quitando una pelusa que estaba en el hombro de Superman.

Puse el convertible frente a mí y acerqué a Batman al volante. R abrió la puertita derecha del auto.

–Cuando lo tenga, te llevaré a pasear –me dijo, como si eso pudiera ocurrir esa misma tarde.

Yo sonreí y pensé en que tendría que recoger mi cabello para que el viento no lo despeinara.

7 comentarios:

Giorgio dijo...

Mi misterio es el mismo que se escapa de mis teclas cuando pasa a tus yemas que teclean tu misterio...

Suena Filosófico pero si lees detenidamente te darás cuenta del porqué?

Estertor dijo...

uuuff...qué bueno! me gusta leerte! Realmente me meto mucho en lo que pasa en tus relatos, muy descriptivos!
P.D.: y sí, todos somos "hijueputas" independientemente de si votamos o no basura en esa esquina.

mauflagrum dijo...

relatas muy bien!

sin más palabras, saludos!

Al dijo...

Me encantaria ver tus dibujos "construyelo y ellos vendran" frase plagiada jajaja; dime como puedo hacerlo y yo estare encantado de apreciar tu forma de expresar arte. Y quiza no se leer entre lineas pero que enigmatica la letra "R".

Marakaramazov dijo...

El señor R sabe ser seductor, pero ella juega... juega un doble rol, me gusta tanto como describes, eres muy explícita Queridita mia; quiero saber más.. me intriga ese señor R... me intriga su aventurera amiga, con quien comparto ese no sé que... ese inesplicable desagrado por R.A.

Saludos
Tamara

Al dijo...

la R es como uno q la gente quiere ser o quiza no pero la "R" es la elegida

Edd Stargazer dijo...

Muy lúdica la historia, estuvo simpática. Ya te visitaré más seguido